El color turquesa es una tonalidad refrescante y calmante que mezcla el azul y el verde. Su vibrante apariencia inspira tranquilidad y creatividad. Además, es conocido por su versatilidad y capacidad para evocar sentimientos de serenidad y equilibrio, siendo una opción popular en diseño de interiores y moda.
El turquesa es conocido por su capacidad para inducir sentimientos de serenidad y calma. Psicológicamente, se asocia con la protección emocional y equilibrio. Su energía fresca y viva simboliza la comunicación clara y la creatividad, haciendo que aquellos expuestos a este color se sientan revitalizados y tranquilos.
El turquesa es frecuentemente utilizado en diseño gráfico y decorativo para transmitir una sensación de paz y frescura. Su aplicabilidad se extiende desde logotipos hasta interiores, destacando por su capacidad de armonizar con una amplia gama de colores y estilos, desde lo más moderno hasta lo clásico.